Anthony Davis (Foto: NBA)

Los Angeles Lakers se colocó a un triunfo del título de la Conferencia Oeste al imponerse sobre Denver Nuggets en el cuarto encuentro de la Serie Final 114 a 108 y quedar con ventaja de 3-1.

Como casi siempre Anthony Davis (34, 10/15 de cancha y 13/14 libres) y LeBron James (26+9+8) sobrellevaron el peso ofensivo del equipo angelino convirtiendo más de la mitad de los puntos. Desde la banca también fue importante la tarea del base Rajon Rondo (11+5+7). La novedad en los Lakers esta vez fue la inclusión del pivote Dwight Howard (12+11 en 23′) en la formación inicial. En Denver, Jamal Murray terminó su labor con 32 unidades (12/20) y 8 asistencias. Un dato no menor resultó la torcedura de tobillo por parte de Davis cuando restaban 6:44 minutos. Después retornó para cerrar el partido aunque nadie sabe cómo evolucionará ese esguince.

Entre Lakers y Denver hubo más diferencias en la cancha que en el resultado y por eso debió esperarse hasta los segundos finales para conocer el ganador más allá que la escuadra angelina encabezó el tanteador durante 44 de 48 minutos y ratificó estar un paso adelante. A diferencia del cruce anterior en esta oportunidad Los Angeles Lakers se adueñó del rebote, especialmente en el tablero ajeno (¡25-6 puntos en segundas instancias!), y dobló a Denver en robos y puntos de contragolpe. Su contracara ha sido la falta de contundencia que le impidió definir antes.

En el tramo inicial Lakers materializó una renta de hasta cuatro posesiones con la presencia de Howard bajo el aro y el protagonismo ofensivo de Davis y James (27-37) y en la primera parte del segundo extendió su ventaja a doce forzándolo a Malone a pedir minuto (32-44 máxima). Allí Davis y James abandonaron la cancha a la vez y Denver logró sacar la cabeza a flote (53-57) retirándose al descanso más cerca de lo que pudo ser dada su opaca producción (55-60).

A lo largo del complemento el trámite poco y nada cambió. Lakers si bien encontró paz a partir de la conducción de Rondo no menos cierto era que no terminaba de capitalizar los huecos defensivos de su rival. Con tres triples en poco más de un minuto recuperó diez tras un parcial de 10 a 2 y amagó despegar pero fue un espejismo como tantos otros en el partido (60-70).

Denver no dejó de luchar y por ratos expuso más voluntad que juego. Con Jokic perdiendo más de lo que ganaba y con cinco faltas el peso recayó en Murray. Igual le alcanzó para complicar (86-87) hasta que reaparecieron en escena Davis y James y otra vez volver a empezar (88-96).

En ese ir y venir se fueron consumiendo los minutos. Sobre el cierre Denver ya no sólo debió pelear contra un rival que se amparaba en sus individualidades para mantenerse sino también con el reloj. Pudo descontar un par de veces a tres (96-99, 102-105) pero su labor no dio para más. A falta de 21 segundos un par de libres de Davis acabaron con su última chance (108-114).

DENVER NUGGETS (3) 108-LOS ANGELES LAKERS (1) 114 (1-3)

Denver (108): Jamal Murray 32, Gary Harris 3, Paul Millsap 5, Jerami Grant 17, Nikola Jokic 16 (fi); Michael Porter 13, Mason Plumlee 3, Torrey Craig 7, Monte Morris 12. DT: Michael Malone. L. A. Lakers (114): Danny Green 3, Kentavious Caldwell Pope 13, LeBron James 26, Anthony Davis 34, Dwigth Howard 12 (fi); Javale McGee 0, Kyle Kuzma 10, Markieff Morris 2, Rajon Rondo 11, Alex Caruso 3. DT: Frank Vogel. Arbitros: James Capers, Rodney Mott, David Guthrie. Parciales: 30-37, 55-60, 84-87. Estadio: Sports Complex Lake Buena Vista, Florida.